enfermerasdepearlharbor
Personajes

Enfermeras en Pearl Harbor

Cuando oímos historias sobre aquel fatídico día en el que el imperio de Japón atacó deliberadamente a la base naval norteamericana en Pearl Harbor, en la isla Hawaiana de Oahu, casi siempre se trata de vivencias protagonizadas por hombres pero, ¿Qué hay de las mujeres?

El 7 de diciembre de 1941 había menos de 1000 enfermeras enroladas en la armada. 82 de ellas estaban sirviendo en Hawai.

Una de esas enfermeras fue Teresa Stauffer Foster, cuya hija se dedica hoy en día a hacer conferencias para difundir la historia de su madre y otras mujeres, unas autenticas pioneras de su tiempo, que se unieron a la armada antes del establecimiento del Cuerpo del Ejercito de Mujeres y el programa de la Reserva de Mujeres de la Marina.

Teresa Stauffer Foster


Las mujeres que se alistaban para ser enfermeras en el ejército debían respetar una serie de normas estrictas. Una de ellas era que debían ser solteras. En el momento en que decidían casarse debían abandonar el cuerpo de enfermeras. Finalmente, en 1943, ante la necesidad de más enfermeras esta norma fue eliminada. A partir de ese momento las mujeres solo podían permanecer en el ejército hasta que eran madres.

Teresa fue destinada a Pearl Harbor 6 meses antes del ataque japonés. Aquel domingo 7 de diciembre, la joven enfermera iba andando tranquilamente junto a otras compañeras que habían terminado a su turno. En aquel momento vieron pasar un avión. El hombre que lo pilotaba hizo un gesto con el brazo, como si las saludara. Ellas educadamente le devolvieron el saludo. Absolutamente después de esto, recibieron la orden de regresar a sus unidades de inmediato.

Tripler General Hospital. Fuente: Ejército Estadounidense

Poco después empezaron a llegar heridos en masa. La situación poco a poco se fue derbordando, hasta el punto de que las enfermeras empezaron a marcar a los heridos con lápiz labial para ayudar con la clasificación. En el caso de los más graves, los que no se podían salvar, los ponían a un lado para poder trabajar con los que podían salvarse.

La experiencia de todos aquellos que vivieron aquella horrible experiencia quedaron tan traumatizados que no querían compartir con nadie su vivencia. Solo querían olvidar.

Otra de esas enfermeras fue Ann Danyo Willgrube. Esta joven se unió al cuerpo de enfermeras de la Armada en 1940. Era enfermera de quirófano en un barco hospital llamado USS Solace. Ann jamás habló de su experiencia en Pearl Harbor, sin embargo su historia acabó saliendo a la luz gracias a una carta que la enfermera envió a un joven estudiante de secundaria que necesitaba información sobre el ataque naval para un trabajo del instituto. La carta fue encontrada por sus familiares en los años 80 mientras limpiaban la casa.

Ann Danyo Willgrube

Ann contaba en aquella carta que fue “la envidia de todas las enfermeras” al ser destinada al USS Solace tras solo 18 meses en el cuerpo. Allí se desempeñaba una tarea muy cómoda.

USS Solace. Fuente: Joe Danyo

El barco llegó a Pearl Harbor a finales de octubre de 1941 y fue atracado cerca de varios acorazados. Su tarea se llevó a cabo con total tranquilidad hasta la mañana del domingo 7 de diciembre. Ann despertó de golpe al oír un ruido, inmediatamente pensó que se trataba de la explosión de una caldera, pero no fue así. La nave sufrió una fuerte sacudida y todos salieron fuera para ver que pasaba.

Miré por el ojo de buey de mi habitación y vi el humo saliendo del USS Arizona. Inmediatamente nuestra enfermera jefe irrumpió en la habitación y me dijo que me vistiera rápidamente y me presentara en el alcázar para el servicio porque los japoneses nos estaban bombardeando”

130 pacientes fueron abordados en el barco, las enfermeras trabajaron sin descanso. El 70% de los pacientes presentaban quemaduras. Todo ello acompañado del ruido de fondo de las armas, temblores en la nave y los aviones volando por encima.

El ataque cogió a la base totalmente por sorpresa y destruyó varios barcos, entre ellos el Oklahoma, el Utah o el Arizona, que todavía se encuentra en el fondo del puerto. Fue el peor ataque que Estados Unidos ha sufrido en toda su historia.

Ann fue una de las primeras mujeres en convertirse en marinero de la armada. Después de 27 años de servicio se retiró como comandante. Se casó con un miembro del Servicios Médicos retirado, Wayne Willgrube, quien también estuvo a bordo del USS Solage durante los ataques en Pearl Harbor. Ann murió el 1988 mientras luchaba contra la enfermedad del Parkinson.

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *