Especial Halloween: La historia macabra de Jack el destripador
En vÍsperas de la festividad de todos los Santos, he querido hacer un guiño al famoso halloween ya que tiene tantos seguidores alrededor del mundo.
Hoy os traigo una historia muy macabra, mil veces más famosa que todas las que estamos acostumbrados a conocer aquí en el blog. Se trata de un personaje victoriano conocido mundialmente como: Jack el destripador.
Nos situamos en el año 1888 en el barrio de White Chapel, en el Londres victoriano. Se trataba de un barrio antaño prospero. Con el tiempo la población empezó a crecer, lo que condujo al aumento del desempleo y al incremento de la pobreza.
Más de setenta mil personas se encontraban en aquellos momentos en situación de absoluta pobreza. Muchas de esas personas eran inmigrantes judíos procedentes de Rusia, Rumanía e Irlanda.
El barrio contaba con unas 230 casas comunitarias que intentaban cubrir las necesidades de una 8500 personas necesitadas de ayuda primaria. Muchas mujeres se veían obligadas a ejercer la prostitución para poder mantener a sus hijos y cubrir sus necesidades básicas. El barrio contaba con alrededor de 1200 prostitutas, entre ellas las victimas de nuestro protagonista de hoy…
El 31 de agosto fue el día en que un misterioso agresor empezó a actuar en las oscuras calles de White Chaper. Actuó en al menos 5 ocasiones aunque es posible que fueran más. Todas sus victimas fueron mujeres que se dedicaban a la prostitución.
- 31 de agosto: la primera victima fue Marie Ann Nichols, de 43 años, divorciada y con 5 hijos. En su difícil situación su única salida era la prostitución para poder subsistir y, y a eso mismo se dedicaba por las noches, en busca de clientes ya que un día se vio obligada a dejar su habitación ya que carecía de los 4 chelines que costaba. Encontró a una persona que se interesó por ella, la cual le pidió un servicio discreto. Dicha persona era el asesino, que la estranguló y le hizo 2 corten en el cuello. Más tarde, el la autopsia, se determinó que el abdomen había sido extraído del cuerpo de la mujer.
- 8 de septiembre: La segunda victima fue Annie Chapman, de 47 años. En esta ocasión el asesino fue extremadamente atroz con el cuerpo de esta victima. Le hizo un corte tan profundo en el cuello que la cabeza quedó casi descolgada del tronco. Extrajo los intestinos y los puso sobre el hombro de la victima. También extrajo otros órganos como el útero o la vejiga. Las malas lenguas también dicen que en aquella época había mucho tráfico de órganos y que algunos podrían haber desaparecido en la funeraria… Otro dato curioso de este caso es que el asesino dejó una nota al lado del cadáver de la mujer que decía: los judíos no serán juzgados de nada. Al tratarse de una época donde abundaba el racismo y antisemitismo, las autoridades decidieron ocultar este mensaje, borrando todo rastro antes de que la gente pudiera verlo.
- 30 de septiembre: La tercera y la cuarta victima fueron Elisabeth Stride y Catherine Eddowes. El cadáver de Elisabeth apareció con un corte en el cuello pero no mostraba signos de mutilación como en los otros casos. Se cree que el agresor fue sorprendido y huyó. Eran las 12’50 dela madrugada. Cuando las autoridades supieron lo ocurrido poco después dedujeron que si este intento había resultado fallido, habría un segundo. Efectivamente así fue. Catherine, la cuarta victima fue asesinada a la 1 y 45 de la madrugada. Esta vez el asesino se entretuvo en hacer un corte en la garganta de la victima. Después le mutiló el rostro y el abdomen. También extrajo un riñón, pecho, intestinos…un autentica carnicería.
- 9 de noviembre: ese día se produjo el último asesinato confirmado de este asesino y sin duda fue el peor. La victima fue una chica llamada Mary Jane Kerry. Irlandesa de gran belleza y cultura, contrajo matrimonio a los 16 años con un minero que murió a los pocos años en una explosión. Desafortunadamente el gobierno se retrasó en el pago de la pensión de viudedad y Mary Jane no tuvo otra alternativa que dedicarse a la prostitución. Dado que era tan atractiva no solían faltarle los clientes, incluso algunos de ellos eran muy adinerados. En una ocasión uno de ellos le invitó a viajar a Francia, proposición que ella aceptó gustosamente. Cuando llevaba allí algún tiempo se dio cuenta de que la vida en Francia no era para ella de manera que quiso volver. Sufría muchos altibajos y poco a poco fue refugiándose en la bebida. Cuando bebía más de la cuenta su carácter se volvía muy agresivo. Cuando la mujer se entero de los últimos sucesos dejó temporalmente la prostitución pues quería evitar a toda costa ser la próxima víctima. Pasados unos meses, al ver que necesitaba ganar más dinero, Mary Jane volvió a su antiguo trabajo. Aquella noche la joven recibió a muchos hombres en su habitación alquilada. Desgraciadamente, a la mañana siguiente su cuerpo fue encontrado en la cama, en una escena de los más desgarrados. Un miembro de las autoridades describió aquella horrible escena: parecía la obra de un demonio. El asesino había cortado orejas, nariz y había levantado la cara de la victima irreconocible ya que el hueso era visible, solo la melena estaba intacta. Había sangre por todas partes. Todo el cuerpo fue destripado y se extrajeron todos los órganos excepto el cerebro. La autopsia fue un proceso que duró 6 horas.
Como veis, se trató de un caso extremadamente sanguinario pero también es verdad que desde el principio estuvo envuelto en un gran sensacionalismo. Los periódicos no callaban, al contrario, metían más leña al fuego cada día que pasaba y en las calles reinaba el miedo. Además, las nuevas técnicas de imprenta permitieron que los periódicos empezaran a publicar dibujos bastante explícitos, lo que hacía cundir más el pánico. Las mujeres iban armadas por la calle por miedo a encontrarse con el agresor.
En dos ocasiones Jack el destripador, como él se hacía llamar, tuvo la osadía de enviar dos cartas a la policía donde se mofada de su investigación y en las cuales les invitaba a que siguieran buscándole. Nunca lo consiguieron, nunca se supo cual era la identidad de aquel ser tan macabro. Pudo haber muerto, huido, quién sabe.
130 años después estos sucesos, la historia de Jack el destripador sigue haciendo estremecer a cualquiera que sepa de ella. Los recursos de la policía de la época poco o nada pudieron hacer para seguir la pista de este asesino y mucho menos de atraparle.